Reparar granito puede llevar más tiempo del que a menudo creemos. Un granito dañado o astillado no siempre es fácil de restaurar de inmediato. Dependiendo del tipo de daño, la reparación puede durar entre una y varias horas. En mi experiencia, pequeñas astillas o rayaduras se pueden solucionar en aproximadamente una hora, especialmente si tienes acceso a los materiales y productos adecuados. Sin embargo, si el daño es más extenso, el proceso puede ser más largo.
La calidad del granito también juega un papel importante en el tiempo de reparación. Un granito de alta densidad y mejor calidad, resistente a las manchas y los impactos, a menudo requiere un mantenimiento menos frecuente, pero cuando sufre daños, se necesita un enfoque más detallado y cuidadoso. Conozco casos en los que ciertas encimeras de granito de lujo, como aquellas de empresa reconocidas por su durabilidad, pueden tardar más en repararse porque cada detalle cuenta.
A veces, contratar a un profesional puede ser la mejor opción, especialmente si el daño es grande y complicado. Los expertos en reparación de superficies de granito cobran distintos precios dependiendo de la extensión del trabajo. Por ejemplo, algunos anuncios publicitarios en mi área mencionan tarifas que oscilan entre 100 y 300 euros. Este tipo de costos refleja no solo el tiempo que pasará reparando, sino también la calidad y durabilidad del trabajo.
Siempre me aseguro de tener a mano los productos necesarios. No puedo enfatizar lo suficiente la importancia de utilizar el kit de reparación correcto. A menudo contiene epoxis y resinas que ayudan a rellenar y disimular las imperfecciones. Si estás planeando hacer la reparación por ti mismo, considera revisar páginas como reparar granito para obtener una guía sobre cómo abordar tu problema específico.
En el mejor de los casos, una reparación adecuada y cuidadosa prolonga la vida útil de tu encimera de granito. Mantener una encimera en buenas condiciones puede evitar futuras reparaciones largas y costosas, así que no subestimes el impacto de un poco de mantenimiento preventivo regular. Asegurarte de que se sella el granito cada uno o dos años también puede reducir la necesidad de reparaciones inesperadas.